El Alba sigue haciendo su camino y ahora tiene una gran oportunidad, ya que le toca andar mucho: hoy inaugura una doble sesión de partidos a domicilio, viajes largos y retos que le han de ayudar a crecer. Empezando por este mediodía. Desde las 14h, juega en Anduva un choque apetecible ante CD Mirandés correspondiente a la quinta jornada de LaLiga Hypermotion.
El cuadro blanco, acostumbrado en los últimos años a ir a territorio rojillo en diciembre, de noche cerrada y con frío paralizante, prueba una nueva fórmula: luz natural, horario más propio para comer y en fechas en las que, aún yéndose de nuestras vidas, el verano está presente. También espera el Alba que este cambio ayude a botar los últimos resultados en Miranda de Ebro, donde ha recibido dos correctivos en sus últimas dos visitas.
Y es que Anduva es un campo difícil para los visitantes. Y este Mirandés, una escuadra rocosa de local y a domicilio. En las cuatro jornadas que llevamos disputadas, aún no ha perdido. Cuenta con 6 puntos - los mismos que el Alba. Y encadena tres empates seguidos, los dos últimos, sin goles (ante Racing Ferrol y Real Zaragoza)
Ante eso el equipo de Alberto González tratará de ser la mejor versión de sí mismo, la que es capaz de dar y que aún no se ha podido expresar por los distintos hechos acaecidos en los partidos. Con ganas de resarcirse, la plantilla manchega es consciente que ganar hoy ayudaría no solo a cambiar la dinámica sino también a asentar la idea que se quiere ejecutar y a expulsar fantasmas tras la forma tan cruel de caer en las últimas semanas.
Por lo que este mediodía, el último domingo de Feria, el equipo quiere alegrar a los suyos desde la distancia de las tierras castellanoleonesas.
